NO a las citas a ciegas.

Aquí esta la razón de por qué no he vuelto a confiar en las citas a ciegas: Hace algunos años vagaba por ahí, en eso me dio por voltear a ver a un cibercafé, y ¡Abuelita de Batman!; ahí estaba esa chava de 2°"C" de la prepa que me inquietaba... Y mejor aun ya se iba del cibercafé, "Esta es mi chance" -Planeé. Ni tarde ni perezoso entre al cibercafé y pedí me rentaran una PC, y desde luego me senté en la que la susodicha había dejado, lo primero que hice fue irme panel de control, usuarios, administración de contraseñas, y ¡Vuala! ya tenía la dirección de su e-mail, meloncitounnumerocualquiera@hotmail.com, no lo recuerdo muy bien que digamos. Salgo de ahí a toda prisa, voy a casa feliz y con cara de pillo que si me ve los preventivos me suben, total, llegue a casa y la agregue al MSN. Días después veo que entra on line, charlábamos, platicábamos, no le comente que estudiamos en el mismo colegio, ya que eso entraba perfectamente en mi plan lleno de intrigas, engaños y traiciones, después de algunas sesiones en el MSN, por fin quedamos de ir a tomar algo, quedamos de vernos en un cibercafé, aja, ahí mismo donde obtuve su e-mail. ¡Jojojo! Se llego el día de la cita, llegue, pero no la vi, ¡Putamadre! no la encontré en todo el pinche cibercafé, en lo que la esperaba me dio por rentar un PC y pendejear un rato por la red, y pinche susto al verla on line; "¿Qué onda? ¿Andonde estas? ¡Andondeeeeeeee! ¿Andondeeeeeeee? -Le pregunte. "Ya estoy en el cibercafé, te estoy esperando..." -Me respondió. Atine a preguntarle cómo iba vestida antes de descubrir mi presencia en ese mismo sitio. Ya una vez que me dijo como estaba vestida, así bien discreto yo, me di a la tarea de identificarla: "¡PUTAMADRE! ¡ES UNA PINCHE VIEJA GACHA!"-Grite, en la mente... en eso le di un bloquear contacto y a la chingada, mejor me fui por unos tacos al pastor... Me había equivocado de e-mail, eso pensaba, hasta que en la fiesta de fin de año del Colegio, vi llegar a la señora esta que erróneamente había agregado a mi lista, con la cual había organizado una "cita a ciegas", y pinche sorpresa que me lleve al darme cuenta que es la mamá de la chava que me gustaba... Supongo que esta chava fue al cibercafé a revisar el e-mail de la mamá, Guadever... Las citas a ciegas son una mamada con dientes... ¡Lo juro!.

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Si; esa de naranja en short gris de piernas sabritass, me inquietaba. Pero no felar, ¡Ve el salvaje ese con el que anda! Repito: ¡NO FELAR!

¡Yay! :)

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